La mayoría de las CPU nuevas no vienen con pasta térmica preaplicada. Sin embargo, algunos minoristas o fabricantes pueden incluir un pequeño tubo de pasta térmica con la compra de la CPU. Siempre es una buena idea consultar el embalaje del producto o el sitio web del fabricante para confirmar si se incluye pasta térmica o no. Si no está incluido, deberás comprar pasta térmica por separado antes de instalar la CPU.